Sigo el blog de las Hermanas Arce desde hace por lo menos 5 años. Me atrae su elogio de la sencillez, su reivindicación del mercado, su apuesta por los ingredientes desnudos y los platos para alimentarnos. Parece que cocinan como piensan, así que cuando vi que iban a abrir por fin un sitio propio en Madrid me emocioné y a la vez pensé en la complejidad de llevar esa cocina reposada y el cuidado de los detalles fuera de su casa.
Los temores se han desvanecido porque el espacio que han abierto en Salesas, al lado del Impact Hub Piamonte, es como poder pasear por una de sus fotos. No hay nada superfluo, todo es funcionalidad y armonía: paredes diáfanas, colores neutros, madera y luz cálida. Todo huele a homemade, desde el pan a la carta de platos, que varía a diario en función de lo que haya en el mercado.
Me gustaron la moussaka y el hummus, también las tortitas con compota de plátano, y le tengo puestas una velas a ese membrillo casero que puedes pedir para acompañar las tostadas. De su repostería me gusta, en general, que no abusa del azúcar así que la fruta sabe a fruta. Lo menos bueno son los precios, quizá algo por encima de propuestas similares.
Aprecio que no hayan descuidado del todo el café, aunque sea un actor secundario en su propuesta. Tienen café de Toma y se han molestado en formarse. Ojalá preparen filtro en algún momento. Esto va directo al buzón de sugerencias.
Además, te puedes llevar a casa su selección de vinos, mermeladas y granola. Hermanas Arce nace con la idea de organizar veladas para compartir platos de picoteo y probar vino natural. Que lleguen pronto. No faltaré a la cita.
Marqués de Monasterio, 8 (cerrado domingos y lunes)